iPad para principiantes

Damos por hecho que habréis oído hablar del iPad últimamente, pero tal vez no os queden claras cuales son las posibilidades de un dispositivo que es bastante difícil de comparar con los cacharros que existían hasta su llegada, así que vamos a tratar de dar una visión general del asunto. Aunque, como sucede en estos casos, si podéis jugar con un iPad de verdad, aunque sea durante un par de minutos, os haréis mucha mejor idea de las posibilidades que este aparato puede tener en vuestra vida cotidiana.

Fotografía de un iPad, por delante y por detrás (que le gusta más)

¿Qué es un iPad?

Vayamos por el principio. Un iPad es básicamente una pantalla multitáctil de 9 pulgadas (aproximadamente el mismo tamaño que la caja de una película en DVD) concebida para el consumo de contenidos. Desde navegación por internet a películas o videojuegos, con una autonomía de 10 horas de uso (en reposo dura semanas enteras) y con un tiempo de arranque de cero segundos (das un botón y la pantalla se enciende instantáneamente, lista para usar).

También puede usarse para crear o comunicar, pero es en el consumo más o menos pasivo en el que el iPad realmente se mueve como pez en el agua y en donde la comparación con un netbook resulta absurda.

Con lo que podríamos resumir con la siguiente frase: Un iPad es un pequeño ordenador, siempre listo para usarse y que rara vez nos dejará tirados sin batería.

¿Cuánto cuesta?

Con la información anterior y aunque el iPad sólo valiera para navegar por internet tirado en el sofá de casa, todos querríamos tener uno. Pero claro, llegamos al delicado asunto del precio. Normalmente se deja este apartado para el final, pero en el caso del iPad (que es en sí mismo una nueva categoría de producto) creo que debemos tenerlo permanentemente en cuenta a la hora de evaluar la compra y plantearlo desde ya mismo.

Bien, existen dos modelos en base a su conectividad, y cada uno de ellos con tres posibles configuraciones en base a su capacidad.

16 GB 32 GB 64 GB
Wi-Fi 479 € 579 € 679 €
Wi-Fi + 3G + GPS 579 € 679 € 779 €

Como veis, la diferencia de precio entre el más económico y el más caro es tremenda (e injustificada, más allá del establecer un nivel extra de exclusividad, algo muy de Apple por otra parte), pero vamos a ponernos en el caso más asequible considerando el modelo básico, Wi-Fi de 16 GB y sin GPS real (tiene un sistema de posicionamiento basado en los puntos de acceso Wi-Fi, que no siempre funciona y cuya precisión dista enormemente de un GPS de verdad, como el que sí incorpora la versión 3G del iPad o los iPhone 3G y 3GS).

¿Qué lleva el iPad?

Al turrón. El iPad contiene de serie un conjunto de aplicaciones bastante interesantes, de entre las que destacan (según mi criterio) el navegador web, el gestor de correo electrónico y los programas de consumo multimedia (música, fotografías y vídeo).

Tanto la navegación web, como el gestor de correo electrónico se benefician enormemente del control táctil y el funcionamiento a pantalla completa, de manera que cuando estás navegando por internet con un iPad la sensación que se produce es muy peculiar ya que parece que estuvieras sujetando la web entre las manos. Es bastante complicado de explicar, pero es tal cual lo cuento, navegar por internet con un iPad ofrece una sensación absolutamente única que invita a leer cada página con más calma (la orientación vertical ayuda mucho en este sentido) y disfrutar de las fotografías (al poder hacer zoom con tan solo tocar dos veces cada imagen) en lugar de hacer clicks indiscriminados y pasar las páginas sin apenas verlas.

Respecto a los contenidos multimedia toda la gracia radica en la calidad y el brillo de la pantalla, que invitan a compartir las fotos y los vídeos de las vacaciones con tus amigos sin tener que andar buscando un ángulo en que la pantalla se vean bien. Digamos que el iPad hace natural aquello de “ven que te voy a enseñar un vídeo que he encontrado en YouTube”.

Fotografía de un iPad mostrando una galería de fotos

Pero bueno, al margen de las aplicaciones de base, toda la gracia del iPad se encuentra (y se encontrará) en la App Store. Dicha tienda es el único canal oficial desde el que instalar aplicaciones en iPad y hace que la clave, como en todos los gadgets avanzados, no radica tanto en las capacidades del dispositivo sobre el papel (que en el caso del iPad podrían ser discutibles) como en el jugo que son capaces de sacarle a éstas los desarrolladores.

Actualmente apenas estamos viendo la punta del iceberg de lo que nos depararán los estudios de desarrollo para iPad, pero ya hay mucho software asombroso. Programas que hacen que se nos haga difícil pensar que hasta ahora no existían este tipo de interacciones y de formas de abordar problemas diarios.

Sólo por dar una pequeña pincelada, en la App Store ya podéis encontrar libros, revistas, programas con los que gestionar vuestras tareas diarias, agendas, videojuegos, etc. Y lo bueno es que la lista no hace más que crecer, el ecosistema de desarrollo de Apple cada vez atrae a más y más nuevos desarrolladores cargados de buenas ideas. Y sí, también hay mucha morralla, pero la variedad siempre acaba siendo buena para nosotros, los usuarios.

Algo malo tendrá

Sí, sin duda, el iPad tiene ciertas limitaciones que no se pueden obviar. Algunas son debidas a cuestiones tecnológicas (que serán corregidas en las versiones venideras) y otras entran en el ámbito filosófico de como orienta Apple este aparato y sus líneas de negocio.

De la primera categoría, el mayor problema del iPad es que es un aparato bastante pesado, sus casi 700 gramos se notan en la mano; y en el brazo. No es que sea un ladrillo pero tampoco es como sostener un libro de bolsillo, algo que suele sorprender a quien coge un iPad por primera vez.

Otra limitación del iPad es que su tipo de pantalla (igual a la de cualquier ordenador normal) es muy difícil de leer a la luz del Sol, de modo que el uso en exteriores queda mermado cuando se compara con la tinta electrónica de los eBooks. También se podría achacar la falta de cámaras (sobre todo la frontal, para videoconferencias) pero su sonada ausencia son el precio que hay que pagar por querer tener un aparato que es nuevo en su especie, el año que viene esto se habrá superado casi con toda seguridad.

Ahora vamos a las cuestiones filosóficas. Apple concibe el iPad (al igual que iPhone y iPod) como su hijo, y es uno de esos padres de “mientras estés bajo mi techo harás lo que yo te diga”. Eso se traduce en que muchas cosas que se pueden hacer con cualquier PC no se pueden hacer con un iPad, no por cuestiones de potencia o tecnología, sino de empecinamiento de Apple. Por ejemplo, a no ser que cambien de idea, nunca podrás leer (¿o debería decir mirar?) una edición electrónica y sin censuras de Playboy en tu iPad, ni podrás conectarlo a una impresora bluetooth que te compraste y que no lleva la dichosa pegatina de “made for iPhone” en su caja, ni podrás compartir tu discoteca por Wi-Fi con un amigo para que se copie tu música, etc.

Son cosas odiosas, son leoninas, pero así es Apple, si quieres un iPad debes pasar por su aro (existen formas de saltarse esto mediante el jailbreak del dispositivo, pero creo que quedan fuera de este primer acercamiento).

¿Para quién es indicado?

Con lo que, una vez descartada la gente que es amante de los cacharritos y se compra todo lo que sale. Y también eliminados los que quieren todo lo que lleva una manzana de Apple en el reverso, pienso que hay mucho público objetivo que podrá ver en el iPad su perfecto aliado, y tal vez aún no lo sepa. Si piensas que podrías estar en esa sombra te propongo una sencilla pregunta con la que averiguarlo, ¿a menudo usas tu ordenador durante horas, sin despegar la mano del ratón más que para meter las búsquedas de Google?

Si la respuesta es sí corre directo a la página de Apple y haz tu compra ya mismo. Si la respuesta es no pasemos a lo próximo.

¿Merece la pena comprar un iPad en lugar de un eBook?

No, sin duda no. Son cosas diferentes y comprar un iPad para leer con él dos horas al día es un error, nunca mejor dicho, de libro. La pantalla del iPad es retroiluminada, lo que hace que, además de que no se vea bien en exteriores y produzca reflejos (como ya hemos comentado) canse mucho la vista en lecturas continuadas. Además la resolución de la pantalla hace que las letras no se vean tan nítidas como en un papel impreso con lo que la experiencia en general es bastante pobre. Si a eso le sumamos el peso la decisión está clara.

Ahora bien, si cada día solo lees durante 30 minutos, mientras vas en el Metro, entonces sí te merece la pena comprar el iPad en lugar de un eBook ya que con el iPad podrás hacer prácticamente lo mismo que con el eBook (sin que de tiempo a que se te canse la vista) y además un enorme puñado de cosas más.

¿Merece la pena comprar un iPad si ya se tiene un netbook?

En este caso creo que la cosa varía mucho en base al uso que se le esté dando al netbook, y el grado de satisfacción. Si tu netbook va siempre contigo, su batería nunca te deja tirado y lo usas en cualquier situación seguramente un iPad sea un aparato redundante en tu forma de trabajo actual. Algo, muy bonito, pero que apenas cubrirá unos pequeños casos de uso que ya tenías más o menos cubiertos con tu netbook; y a un precio que no es precisamente un regalo.

Si por contra tu netbook ha terminado siendo una compra cuestionable, al que le falta potencia para algunas de las cosas que le pides y cuya batería siempre se acaba cuando más lo necesitas para enviar un simple correo electrónico, entonces, el iPad probablemente te encaje a las mil maravillas.

¿Merece la pena comprar un iPad si ya se tiene un iPhone o iPod touch?

Nuevamente la cosa depende mucho del uso que se le de a lo que teníamos hasta ahora. Si con tu iPhone te manejas bien, gestionas tu correo sin problemas y navegas para salir del paso es probable que el iPad sea un buen capricho que solape sus funcionalidades con lo que ya tienes hasta ahora y sí se convierta en el tan cacareado “iPod touch gigante”.

Fotografía de un iPad con un juego de coches, Real Racing

Pero no hay que olvidar que por otro lado presenta la ventaja de que muchas de las aplicaciones que ya disfrutas en tu iPhone ya han sido (o están siendo) portadas a iPad, lo que ofrece nuevas posibilidades y formas de abordar las tareas que seguramente quieras utilizar.

En el caso de los videojuegos el tamaño de la pantalla (y el hecho de que puedan meterse hasta tres y cuatro manos para jugar con amigos) introduce todo un nuevo horizonte, valga como ejemplo la versión para iPad de FlightControl en que cada jugador puede quedarse con un aeropuerto y pasarse el tráfico directamente con los dedos.

Accesorios, ¿es necesario un teclado de verdad?

Como pasa con todos estos gadgets ya hay un abanico gigante de accesorios, desde cosas puramente cosméticas (como las fundas o los docks de carga), hasta elementos de interacción como las bases con teclado.

Fotografía de algunos de los accesorios para el iPad

Lógicamente cada usuario es un mundo, y nadie como uno mismo conoce sus necesidades, pero mi consejo personal es que no planteéis la compra del iPad vinculada al uso con un teclado físico. El iPad no ha sido diseñado para eso, aunque Apple vende su suite ofimática para iPad se nota que no es un aparato hecho para escribir y crear (a excepción, tal vez, de los programas de dibujo), es un aparato para tener entre las manos navegando por la web, para girarlo sobre si mismo y ver mejor una fotografía en vertical y luego dejarlo tirado en el sofá cuando te suene el teléfono y sean los de Movistar que quieren venderte una oferta que no puedes dejar pasar y cuando les consigas dar esquinazo volver al sofá y continuar donde lo dejaste. Comprar un iPad y dejarlo enganchado a un dock con teclado, en una mesa, es como tener un león en una jaula.

Conclusión

Toda la entrada ha sido una opinión personal sobre la que imagino que mucha gente estará o no de acuerdo, pero en este punto final creo que no hay discusión.

El iPad es un cacharro que ha tomado muchas ideas que venían pululando desde hacía años (los tablets PC, por ejemplo) pero las ha combinado de una forma genuinamente nueva, creando algo nunca visto hasta ahora en términos de facilidad de uso y disponibilidad (permitídme insistir en lo rápido que se despierta y la enorme duración de la batería en reposo). Probablemente, en cuestión de meses, otros fabricantes tengan productos similares en el mercado y la lucha por los clientes se termine decidiendo en pequeños detalles (ligeras diferencias en la duración de las baterías, o el peso, o la resolución de las pantallas) pero la verdad es que, hoy por hoy, al iPad, si le dejas jugar en su terreno, es imbatible.

Sobre el autor

Hugo desarrolla aplicaciones para iPad y iPhone en bilambee.

14 comentarios en «iPad para principiantes»

  1. Pingback: Bitacoras.com
  2. Espi: sí, sin duda es un gran handicap, pero es cierto que una gran parte de la industria está convirtiendo sus vídeos a H264, lo que los hace accesibles desde iPad (entre otros).

  3. Es un cacharrito que esta es muy bien. Pero tiene dos peros enormes. El primero es el precio. No hace nada espectacular que justifique esa inversion enorme en algo que usaras como usas ahora tu iphone o tu nexus.
    Es verdad es que la navegacion es muy fluida (el multimedia es una pasada) pero en internet esta muy cojo con flash. No me vengais con historias de chicos inventadas por Jobs sobre rendimiento y cosumo (hay una comprarativa entre html5 y flash en rendimiento y ha que no sabeis quien gana??) o que el futuro es html5 porque la verdad es que será el futuro pero el presente pasa por adobe.

    Muy caro para ser un capricho y limitado por politica y empecinamiento de Jobs.

    Si lo bajaras 200 euros me lo compraria sin dudarlo.

  4. Orbyt: eso que dices es falso, la primera aplicación de un diario de España para iPad fue la del diario ABC.

    Y, por desgracia, ni Orbyt ni la de ABC están a la altura de lo que hacen en Estados Unidos diarios como USA Today.

  5. Hablando de prensa para iPad, acaba de salir la edicion digital de la revista tecnologico-digulgativa Wired
    http://www.wired.com/magazine/2010/05/mag_editors_letter/

    Son 4 euros, un poco cara para la cantidad ingente de publicidad que tiene, pero esta muy bien hecha y es muy agradable de leer. Se puede pasar paginas en horizontal como una revista, pero los articulos despliegan hacia abajo.

    Es un buen ejemplo de como el iPad va un paso más allá en la experiencia de usuario.

  6. Priceless….No soporta Flash peroooooo……

    Digamos que el iPad hace natural aquello de “ven que te voy a enseñar un vídeo que he encontrado en YouTube”.

    Menudo analisis.

  7. SL, tiene una aplicación nativa de YouTube que carga los vídeos directamente en H264, sin necesidad de Flash y que va de puta madre. Esto es así desde que salió el primer iPhone, así que sospecho que no has tocado un iPhone ni iPod touch en tu vida.

    De hecho el propio YouTube, y otros muchos sitios, ya no necesitan Flash para reproducir los vídeos porque se están pasando a HTML 5.

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