Cuando las páginas web parpadeaban

Una de las cosas más curiosas del imparable avance de la tecnología en general y de internet en particular es que, si bien cada día tenemos cosas nuevas para probar, también desaparecen otras muchas sin que nadie se fije en ellas. Las primeras se presentan a bombo y platillo, inundan la web en cuestión de horas dejando a su paso cientos de análisis (de esos que dicen todos lo mismo) y nos dejan atontados, pero de las otras, de las que desaparecen, nadie dice nada; se van por la puerta de atrás.

Si pensamos en páginas de los 90 seguro que rápidamente os vienen a la cabeza los GIF animados, las páginas “en construcción” y los colores chillones, pero entre toda esa mezcla atroz (a la que muchos contribuimos eh, que hoy día todo el mundo se las da de zen pero aquellas páginas no se hacían solas) había un par de elementos que eran los reyes del mambo, las marquesinas y las etiquetas blink.

El caso de la creación de la etiqueta blink es bastante gracioso narrado en palabras de su inventor, Lou Montulli (coautor de Lynx, fundador de Netscape y responsable de llevar a la web innovaciones como las cookies o las conexiones HTTPS), en el artículo The Origins of the <Blink> Tag; que demuestra lo en pañales que estaba la web en aquellos años y como una simple broma acabó por convertirse en lo más desagradable que se encontraba uno que se pusiera a navegar por primera vez en su vida.

Blink nació como una coña marinera, concebida durante una noche de copas del equipo de desarrollo de Netscape y hecha de un día para otro con el sólo propósito de cachondearse un poco creando algo que pudiera mostrar Lynx (navegador que funciona en modo consola, es decir, en texto plano y que lógicamente no puede representar distintos tamaños de fuente ni tipografías variadas). Una broma no documentada que sin embargo se propagó velozmente, haciendo que media internet empezase a parpadear como las luces de neón de los bares de carretera y convirtiendo a blink en uno de los elementos más odiados de toda la larga lista de elementos no oficiales de HTML. Según su creador, “lo peor que he hecho por internet jamás”, muy al estilo de la excusa pública de Vincent Connare, creador de la Comic Sans.

Por cierto, pese a todo, Lynx nunca llegó a interpretar la etiqueta blink.

4 comentarios en «<blink>Cuando las páginas web parpadeaban</blink>»

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  2. La de ideas peregrinas que se te pueden ocurrir en una noche de copas. Lo que pasa es que normalmente no suelen tener consecuencias: llega la mañana, vuelves a estar sobrio, y la fabulosa idea de la noche la ves como la gilipollez que en realidad es. No fue el caso.

    ¿Y qué decir de los “blink”? Como has dicho, era una época de colores chillones, páginas en construcción, marquesinas… había una web que se hacía llamar “la peor página web de la historia” y que enumeraba (con ejemplos) las atrocidades más comunes que se solían poner.

    Saludos.
    P.D.: nos veremos en el EBE

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